domingo, 10 de julio de 2011

Aun sigo sintiendo lo mismo

Llevo varios minutos frente al teclado sin saber como iniciar el relato. Y no porque me falten palabras para hacerlo, sino porque son tantas y tan llenas de emoción, que se atropellan entre sí.

Lo mejor tal vez sea recordar que hoy es el 18 aniversario de mi matrimonio. Que este matrimonio que ha pasado por todas las etapas y colores, hoy cumple la mayoría de edad. Que son 18 años ya desde que la mujer con la que cohabito - y que además vive en mi - aceptó mi promesa en una calurosa capillita de Monclova.
Para recordarlo, recuperé algo que escribí para ella y que pegué en un collage de fotos que teníamos en nuestra primera casa. Hoy que habitamos la cuarta sé que las paredes son meramente incidentales y que HOGAR es donde está ella, el centro de mi universo...y que aunque algunas de las cosas escritas entonces han cambiado...eso que puse en blanco y negro a los 4 meses de casados permanece...aun sigo sintiendo lo mismo......



Hoy desperté y me sorprendió encontrar a mi lado a una mujer de rostro sereno y de cálidos brazos que rodeaban mi cuello. Me sorprendió el encontrar lo facilmente que su cuerpo se ajustaba al mío, como si llenara un hueco llevado desde mi juventud

Y empecé a recordar los momentos vividos en nuestro mutuo caminar, y decidí  colgar en un cuadro fotografías que contaran pequeñas historias sobre lo que esa mujer era y lo que representaba para mí.

Y vaya que hallé muchas facetas ! La mujer misteriosa que elude las fotos por sorpresa, pero que le encanta sorprenderme a mí. La chispeante bailarina de una fiesta de graduación, la cansada viajera de luna de miel. La jovencita soñadora de jeans y banda en la cabeza, el sonriente rostro de un close up, la amorosa y "tierna" madre estranguladora de perros, la mujer que acepta tomarme  fotos en psoes ridículasjunto a un montón de muñecos o junto a un conejo de dos metros de alto.

Me sorprendí hallando que la mujer a mi lado es también aquella que tolera pacientemente mis incontrolables e incontables momentos de inmadurez e irascibilidad y que sin embargo con su sola presencia me hace crecer como persona. Me sorpendí porque aunque al nacer nos separaban tantos factores y kilómetros, el destino se ha encargado de unirnos y nosotros de amarnos.

Me sorprendí porque recien hoy me doy cuenta...me casé con un Angel !!! 

Octubre 2003, Monterrey Nuevo León

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