viernes, 14 de septiembre de 2012

Caza Pasteles Cazado !



Cuando entré a la empresa en la que actualmente laboro, venia con más de una década de manejar raza como supervisor de producción o su equivalente y siempre en piso. Mi  florido  lenguaje reprimido  y mi incomprensión del ambiente de “oficinas” al máximo.
Desde el primer día me di cuenta que una de mis funciones era “publicar” – mediante un correo a todos los usuarios, de los cumpleaños que se celebraban CADA DIA .  WTF !!!!!!!!!!.
Dado que no recibí el puesto de nadie  (que no hubo un “hand over “o entrega de funciones que incluyera entrenamiento), enviar el mensajito y la veracidad de esos datos me importaba poco menos que un carajo….mi preocupación principal  no era decirle a la gente quien cumplía años, sino mas bien aprender como cargar los descuentos de nomina a los empleados  o efectuar los pagos al proveedor del Servicio de  Comedor o del Transporte. Eso hasta que el tercer día recibí el mensaje de que me reportara con el gerente del área.
Entré a su oficina y tras los saludos típicos  – “como te has sentido?, como te tratan tus compañeras? Etc…”, me llevo al tema….me dijo algo mas o menos  así:
“Mire, yo sé que usted no lo entiende, porque acaba de ingresar; pero la notificación de los cumpleaños es parte de las tradiciones informales de nuestra empresa….es la forma de que los empleados se enteren de quien celebra su cumpleaños y eso les permite ir a su lugar, felicitarlo y compartir con ellos  el abrazo…una rebanada de pastel...”
Yo creo que ha de haber visto mi cara de incredulidad porque le siguió:
“Aunque hay alguna gente que exagera, como Laboral, permitimos que suceda, porque la costumbre fomenta la unión y un buen clima organizacional, por lo que le pido por favor que revise que esté actualizada la base de datos y que la ponga al corriente para que no falte nadie de ser incluido”
Cuando un jefe de mi jefe  me pide algo “por favor”, mi cerebro automáticamente lo decodifica y traduce como un “buyale cabrón guevón, póngase a jalar en chinga con este pendiente”,  ese mismo día aprendí a descargar el archivo de fechas de nacimiento de todos los HNU – algo así como empleados de confianza, y que en esencia eran los que tenían cuenta de correo. También aprendí en ese día  como enviar los correos posfechados para evitar que si se me olvidaba, alguna supervisora se quedara sin felicitación y pastel de su gente – aparentemente ese había sido el motivo de la llamada del Jefazo (o “mi Viejón”, como después le llamaba al señorón  aquél).

También aprendí que aunque parecía usanza  de oficina de gobierno , el reparto de pastel y la broma del cumpleaños era efectivamente un desfogue natural  de los empleados de la empresa….tan bien lo aprendí que – junto con otros individuos igual de descarados que yo – me convertí en un “caza pasteles” profesional…hasta una frase desarrollé….”quitémonos la máscara…tu no me conoces,  ni yo a ti, pero vengo por una rebanada de pastel  y he de darte un abrazo para conseguirlo”.
La reacción inicial siempre es de – Y ESTE GUEY QUIEN  ES ????....Pero siempre alojan el pastel y una sonrisa.
Tal destreza adquirimos con el tiempo que incluso  hasta soy  requerido cuando alguien celebra su onomástico….”oiga cumplí años, y no vino a felicitarme…va a ver, ehhh !!”…en ocasiones me hablan por teléfono para invitarme – casi hasta me siento como si fuera a hacer un show infantil como el de las muñequitas  o  que les bailemos….como strippers……!!....
He llegado al punto de afirmar que un cumpleaños no es cumpleaños sin la presencia de “los cazapasteles”, y a tal grado cumplimos que solamente  a un cumpleaños no voy……al mío…..

Cuando me toca a mí, todos los demás – o la mayoría -  vienen !!!
No…..no se trata de que tenga tantos amigos o que sea yo muy popular…..mas bien se trata de que pague lo que he bateado durante todo un año.
En esta ocasión, hubo ch…orro de frituras, un buen de dulces y un pastel  gigante – casi de quinceañera – con el escudo de mi equipo favorito….un pastel que  antes de una hora se había consumido al 80 %.  Puedo decir que la espalda me duele de tanta palmada (aunque estaría exagerando)  y  que el corazón esta hinchado de alegría por tanta sonrisa que recibí (aunque mas bien ha de ser por el colesterol)….lo que sí aseguro sin duda alguna es que con tal de que el año entrante pueda recibir tanta buena vibra , me comprometo a ir a todos y cada uno de los cumpleaños que haya en oficinas generales de mi gloriosa empresa ….y si no lo hiciera ….que el pueblo me lo demande….HE  DICHO ¡!!

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